- Fuente: Industrial Scientific Corp.
- Traducción: Andrea Sanguinetti, Impomak S.A.
- Fecha: 30/03/2020
Los detectores de gases portátiles, para una máxima efectividad, se deben utilizar en la zona de respiración, que de acuerdo a OSHA (Administración de Salud y Seguridad de EEUU) corresponde a “una semiesfera desde los hombros hacia el frente dentro de un radio de aproximadamente 15 a 22 cm”.
Desafortunadamente, esta ubicación implica que cualquier suciedad o bacterias presentes en el instrumento estarán también en la zona de respiración del usuario. Si se requiere limpiarlo, es probable que instintivamente se tienda a usar una toalla desinfectante, como se haría con cualquier otra superficie. No obstante, en este caso, sería una mala idea.
¿Por qué no utilizar desinfectantes comunes?
Los sensores de un detector son altamente sensibles a una serie de diferentes elementos químicos, incluyendo alcohol y otros desinfectantes, de modo que utilizarlos podría impedir que el equipo alerte al usuario de una situación de riesgo. Asimismo, los limpiadores en base a alcohol harán que se active la alarma del monitor. Si se realiza una puesta a cero demasiado pronto, el detector arrojará una falsa lectura baja, lo que podría dejar al usuario en una condición insegura.
Piezas de goma, plástico y filtros del monitor también pueden absorber elementos químicos desinfectantes, lo que constituye un problema pues algunos corresponden a los mismos que es posible monitorear. Este efecto no dura demasiado tiempo, pero el lapso que se debe esperar para realizar una puesta a cero del equipo varía, por lo que queda demasiado margen para error.
¿Cómo limpiar un detector de gases sin dañarlo?
Para la suciedad habitual, se recomienda limpiarlo con un paño y una solución de 8 a 10 partes de agua por una de lavalozas (por ejemplo, Dawn ®). Esta limpiará el equipo con menor riesgo de dañar los sensores o generar un mal funcionamiento. No obstante, esta solución será efectiva para la suciedad que se pueda acumular día a día y no necesariamente eliminará bacterias o virus que puedan alojarse en su superficie.
Si se requiere una sanitización más profunda, el equipo se debe limpiar cuidadosamente con un paño y una solución de alrededor de 50 partes de agua por una de agente blanqueador (por ejemplo, los de uso doméstico con contenido de hipoclorito de sodio), según la recomendación de CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos). De acuerdo a CDC, se debe utilizar una proporción de 5 cucharas de blanqueador por galón de agua (3,8 litros aproximadamente) o 4 cucharaditas de blanqueador por 1 litro de agua (alrededor de 20 mililitros por litro).
Para mayor información acerca de las prácticas generales de desinfección, consultar: CDC’s Environmental Cleaning and Disinfection Recommendations.Independiente del método de limpieza utilizado, es muy importante acoplar el detector a su docking station (estación de acoplamiento) o someterlo a la prueba operacional habitual (bump test) a objeto de asegurar su correcto funcionamiento.